El Autismo en el Género Femenino

     La presente entrada analiza el tema del autismo en niñas y mujeres. Se prometió en la entrada anterior.

     Este escrito tiene como base el artículo titulado "The Autism Dilemma for Women Diagnosis" publicado en la sección "The Oracle" dentro del sitio web de la organización estadounidense, Organization for Autism Research (OAR), el 26 de octubre de 2018. Sé que no es adecuado elaborar un escrito o análisis a partir de una sola fuente. Sin embargo, esta presenta su información muy bien tratada y documentada, además de que tiene las ligas para acceder a sus propias fuentes. Es por ello que se tomó la decisión de elaborar este escrito a partir de ella. También, se invita a revisarla ya que es, como ya se dijo, de mucho interés. Se deja el enlace al artículo original aquí con la advertencia de que está en idioma inglés:

https://researchautism.org/the-autism-dilemma-for-women-diagnosis/ 

     El artículo inicia sobre una reflexión acerca del sesgo de género que las niñas y las mujeres encuentran en casi todos los aspectos de su vida. Como comentario, recomiendo revisar mi posición con respecto a ello y al feminismo en general en la entrada titulada "Apuntes sobre un Intento de Visión del Feminismo" en este mismo blog. Para la OAR, el autismo no es la excepción. En general, desarrolla la idea de que el sesgo de género es un elemento importante en el infra-diagnóstico de esta condición en niñas y mujeres.

     Según el artículo, en el estudio más reciente sobre el tema se encuentra una prevalencia de diagnósticos de autismo entre hombres y mujeres de 3:1, es decir, tres hombres diagnosticados por cada mujer diagnosticada. Este ratio redujo las prevalencias que se tenían en el pasado, como de 5:1, por ejemplo, y señala que pueden tener origen en el sesgo de género más que en un hecho real de una proporción de autismo mayor en hombres que en mujeres.

     Los elementos que sustentan el sesgo de género en este tema, señalados en el artículo, son los siguientes:

1. El estigma de que el autismo sólo se manifiesta en los hombres, creído aún en la actualidad por buena parte del público en general e incluso por profesionales de la salud.
2. Para llevar a cabo los primeros estudios sobre el autismo, se reclutaron sólo a hombres como sujetos de observación.
3. A partir de nuevos estudios, se ha visto que el autismo también se puede manifestar en niñas y en mujeres, pero que presenta características que son distintas con respecto del que se tiene en niños y hombres. En los siguientes puntos se desarrollan algunas de ellas.
4. El factor principal que dificulta el diagnóstico del autismo en niñas y mujeres, es que ellas tienden a "enmascarar" mejor su condición de lo que lo hacen sus contrapartes masculinos. Son mejores en el mantenimiento del contacto visual y en la captación de las conductas sociales, siendo capaces de mimetizarlas. Esto les permite actuar como si fueran personas neurotípicas con mayor eficiencia. Sin embargo, esta habilidad les cobra un precio alto, ya que les hace sufrir agotamiento físico y mental, manifestado en crisis de ansiedad, colapsos emocionales y depresión.
5. Otro elemento es la conducta de la niña autista. El autismo parece facilitar en las niñas el desarrollo de comportamientos más socialmente esperados para su género, según los convencionalismos. Por ejemplo, el ser más "tranquilas", "calladas", "sensorialmente sensibles", "menos amigueras", "preferir el juego en casa al de en la calle", entre otros. Mientras que los niños autistas son más abiertos a mostrar conductas menos aceptables socialmente, a "portarse mal", las niñas autistas encierran sus frustraciones tendiendo hacia la ansiedad y la depresión.
6. Un elemento más está en los temas de interés obsesivo. Las niñas y mujeres autistas tienen temas de interés obsesivo igual que los niños y hombres autistas, sin embargo, ellas se suelen interesar en temas más "normales" que ellos, como animales, plantas, shows de televisión o celebridades.
7. Otro elemento, colateral, es la representación del autismo en la cultura popular y en los medios de entretenimiento, en donde la gran mayoría de personajes autistas presentados en ficciones, ya sean películas o series, son de género masculino.
8. Lo anterior hace que lo común sea que la mujer autista reciba su diagnóstico en la adolescencia o en la edad adulta (el artículo habla de un caso en que una mujer no recibió su diagnóstico hasta que cumplió 48 años de edad). Sólo el 8% de las mujeres autistas son diagnosticadas antes de los 6 años, y sólo el 20% antes de los 11 años, en Estados Unidos. Esto significa que, en ese país, el 80% de las mujeres autistas que accedieron a un diagnóstico, lo hicieron después de los 11 años. Para obtener una mejor perspectiva, se pueden comparar las cifras con las que corresponden a sus contrapartes masculinos; 25% de hombres autistas diagnosticados antes de los 6 años y 50% antes de los 11 años.

     Como en otros aspectos de la vida, el sesgo de género daña a la mujer cuando es autista principalmente en dos factores:

• La dificultad o falta total en el acceso a un diagnóstico temprano, lo cual hace que se le prive de los beneficios, tanto de la autocomprensión como de la atención adecuada desde las etapas iniciales de la vida.
• La exposición a diagnósticos incorrectos y con ello la aplicación de tratamientos que no les son adecuados, los cuales o no la ayudan a mejorar dentro de su condición o, incluso, la pueden dañar.

     Como conclusión, aterrizo en que el autismo es otro tema que también se tiene que abordar con perspectiva de género. Este asunto se tiene que investigar con más profundidad. Considero que es adecuado que sea abordado por una mayor cantidad de especialistas, y si son de género femenino, mejor aún.

Zapopan, Jalisco, abril de 2022.

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